sábado, 3 de enero de 2009

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Me gusta sentirte así, estar en un lugar donde mil ojos nos ven, donde nos pueden escuchar... para mí no existe más que tu respirar, tus manos, tu olor... te asustas, te pones nervioso, yo no... a mi me exita, me encanta el peligro y a pesar de todo eres maravilloso, me gusta que tus manos me conozcan tanto que ya no es necesario ni que me mires para saber donde deben ir, que tu lengua pase por cada rincón de mi cuerpo, sentirte con fuerza, rápido y lento, tierno y salvaje, siguiendo tus instintos, cumpliendo tus deseos, que te sientas el mejor y a la vez culpable... no te controles, no me gusta que lo hagas, tomame con ganas, como si cada momento fuera la última vez, como si en cada segundo nuestra vida se fuera a acabar, abrazame fuerte para poder sentir tu cuerpo calido, y que mi respiración agitada, cortada y compleja te haga entender que me derrito con un solo roce de tus dedos, que me exito, que acabo en cada suspiro, en cada movimiento y en cada vez que hacemos el amor...